Este miércoles 14 de mayo, el Perú se despertó con un paro nacional que afectó el transporte, el comercio y las clases en varias partes del país. La razón: la gente está harta de la inseguridad, los asaltos, las extorsiones y el sicariato.
La protesta fue organizada por la Alianza Nacional de Transportistas, y se sumaron conductores, mototaxistas, comerciantes y otros sectores. Todos piden lo mismo: que la presidenta Dina Boluarte renuncie, porque sienten que no está haciendo nada real para frenar el crimen.
En algunas ciudades como Puno, Arequipa y Cusco, la protesta fue total: cerraron carreteras, suspendieron rutas y prácticamente se paralizó todo. En Lima, el transporte funcionó más o menos normal, pero los manifestantes llegaron hasta el Congreso para hacer oír su voz.
El mensaje fue claro: el país no aguanta más violencia, y la gente exige respuestas reales.
